Benalroma, la villa romana de Benalmádena
Benalroma es uno de los vestigios arqueológicos más importantes que encontramos en Benalmádena. Se trata de la única Villa romana costera de la provincia de Málaga. Data del siglo III d. C, y se ubica en primera línea de costa, en la intersección de la Avenida Antonio Machado y la Avenida de las Palmeras. A finales del siglo IV d. C, fue completamente abandonada.
En el siglo II d. C, tras la Segunda Guerra Púnica, toda la población de Benalmádena era completamente romana. Es por ello que el municipio todavía cuenta con diversos restos arqueológicos que muestran cómo se organizaba la sociedad de la época. A día de hoy existen dos asentamientos romanos en Benalmádena, pues además de Benalroma, también encontramos el yacimiento de Torremuelle.
Fue en 1980 cuando se hallaron los primeros restos arqueológicos de la villa romana de Benalmádena. Posteriormente se iniciaron los trabajos de excavación con los arqueólogos de la Universidad de Málaga y el apoyo del Ayuntamiento de Benalmádena. Los expertos dejaron al descubierto lo que fue una lujosa villa con más de 2000 años de historia. Los restos mejores conservados se hallan en lo que sería una parte ajardinada conocida como "viridarium", en donde se puede observar los restos de una fuente decorada con motivos marinos. También se encontraron un grupo de piletas que transportaban el agua generando un efecto de cascada. Esta corriente de agua llegaba hasta la playa gracias a un canal aún visible en la Avenida Antonio Machado. En este jardín, los habitantes de la villa pasarían el tiempo dando paseos o meditando entre árboles y flores.
Muy cerca a esta zona, se encuentran los restos de lo que fue una factoría romana de aceite. Esta parte es la que se ubica junto a la rotonda de los Molinillos. En esta zona aún se puede apreciar parte de la sala de prensado, las piedras y un suelo con canales por donde correría el aceite hacia la sala de decantación. Este es el único ejemplo en la provincia de Málaga de instalaciones oleícolas localizadas en la costa. La producción de aceite, eje central de la dieta mediterránea, fue un elemento clave de la economía romana en nuestros territorios. Esta almazara estuvo en funcionamiento durante 200 años, pues en el siglo III d. C, se transformó en una fábrica de salazones y en un horno de cerámica.
En 2004, cuando se iniciaron unas obras en la carretera, aparecieron restos de unas termas y una habitación decorada con bellos mosaicos. Todos estos restos muy posiblemente formaron parte de una enorme "villa a mare" que estuvo en uso durante 500 años, dedicada a la explotación del campo y del mar. Actualmente podemos conocer mejor el pasado de Benalmádena en el Centro de la Historia e interpretación arqueológica, ubicado junto al yacimiento de la rotonda de Los Molinillos, en donde podemos aprender más sobre la economía romana en Benalmádena: la pesca y la fábrica de salazones. Sin duda, una parada obligatoria para entender mejor el pasado de nuestra bella ciudad.
Fuentes:
- "Villas romanas en Benalmádena Costa". Gonzalo Pineda.
- "Benalroma, villa romana de disfrute y trabajo junto al mar". Itziar Merino